16 octubre 2006
El que anima en Graderío Sur
Vaya partidito ayer
Osasuna con un equipo plano, sin profundidad, con el centro del campo desmoronado y un contrario que ganó el partido sólo a base de ver vídeos de partidos anteriores de esta temporada.
Y además, ¿qué pasaba ayer en el estadio? Nadie sabe dónde estaba el que anima en Graderío Sur. Hubo Riau-Riau al inicio del partido, y hasta el minuto 25 no sonó el primer grito de ánimo al equipo.
Muchas veces en los foros rojillos podemos ver que a los aficionados se nos llena la boca hablando de la mejor afición de España. Pero cada vez más somos una afición del montón. De esas que se deja llevar por el estado de ánimo del equipo. Que arrea, animo, que frena, me callo.
Al que tenga alguna duda que se pase por el Carranza o por el Calderón, incluso por San Mamés que pilla cerca, a ver cuando un cántico de Osasuna suena como un 'Atleti' de esos de antes de tirar los corners.
No cuento como gritos de ánimo unos cuantos que suenan en el fondo sur de nuestro estadio. Porque me pregunto yo, ¿corre más Webo porque 3.000 voces se acuerden en la madre del Zaragoza?, ¿Josetxo remata mejor de cabeza cuando nos acordamos de la madre de Miguel Sanz o Yolanda Barcina?
Bueno, no niego el derecho de cada uno a decir lo que quiera y apechugar con lo que pase, pero eso animar al equipo, lo que se llama animar, creo que no es.
Ya se que ayer era el Oinez, sé que estamos en plena temporada de hongos, que el sábado Donosti estaba a reventar de 'meaplayas', que el partido fue muy flojo, pero mi pregunta es, ¿Donde estaba el que anima en Graderio Sur?
Osasuna con un equipo plano, sin profundidad, con el centro del campo desmoronado y un contrario que ganó el partido sólo a base de ver vídeos de partidos anteriores de esta temporada.
Y además, ¿qué pasaba ayer en el estadio? Nadie sabe dónde estaba el que anima en Graderío Sur. Hubo Riau-Riau al inicio del partido, y hasta el minuto 25 no sonó el primer grito de ánimo al equipo.
Muchas veces en los foros rojillos podemos ver que a los aficionados se nos llena la boca hablando de la mejor afición de España. Pero cada vez más somos una afición del montón. De esas que se deja llevar por el estado de ánimo del equipo. Que arrea, animo, que frena, me callo.
Al que tenga alguna duda que se pase por el Carranza o por el Calderón, incluso por San Mamés que pilla cerca, a ver cuando un cántico de Osasuna suena como un 'Atleti' de esos de antes de tirar los corners.
No cuento como gritos de ánimo unos cuantos que suenan en el fondo sur de nuestro estadio. Porque me pregunto yo, ¿corre más Webo porque 3.000 voces se acuerden en la madre del Zaragoza?, ¿Josetxo remata mejor de cabeza cuando nos acordamos de la madre de Miguel Sanz o Yolanda Barcina?
Bueno, no niego el derecho de cada uno a decir lo que quiera y apechugar con lo que pase, pero eso animar al equipo, lo que se llama animar, creo que no es.
Ya se que ayer era el Oinez, sé que estamos en plena temporada de hongos, que el sábado Donosti estaba a reventar de 'meaplayas', que el partido fue muy flojo, pero mi pregunta es, ¿Donde estaba el que anima en Graderio Sur?